Destilación

El aparato de destilación que ve en el armario se denomina "alambique". La destilación es el método más conocido. Funciona de la siguiente manera: primero se introduce agua en el matraz grande junto con la sustancia que se desea oler. A continuación, se enciende el fuego. Por razones de seguridad, aquí se utiliza la electricidad, pero en el pasado se solía utilizar madera para calentar el agua.

El agua hervirá y se convertirá en vapor perfumado porque ha tomado el olor de la materia prima que has elegido. El vapor subirá y entrará en el pequeño "serpentín" que hay al lado. En la envoltura de este pequeño "espagueti" hay un vacío por el que circula continuamente agua fría. El tubo de la izquierda se conecta al agua fría para que el vapor se transforme en líquido. El tubo de la derecha sirve para extraer el agua. El vapor que se ha convertido en líquido caerá en el botecito que ves en el fondo. Ahora tienes agua con el aroma de lo que pusiste en el globo, pero hay demasiada agua, la fragancia es muy ligera, ¡muy diluida!

Para concentrar el líquido perfumado, vamos a quitar el agua. Vierte el frasco en la ampolla que ves aquí a la izquierda, se llama "ampolla de decantación". La parte más aceitosa flotará en la parte superior del líquido y la parte más líquida quedará en el fondo de la ampolla. Abrimos el pequeño grifo de cristal que se ve en la ampolla. Dejamos que salga toda la parte que parece agua. Esta es la parte menos interesante. Cerramos el grifo cuando lleguemos a la parte que parece aceite. Estos son los aceites esenciales, la parte más bonita que utilizaremos para hacer el perfume.

Contrariamente a lo que mucha gente cree, ¡no se puede obtener aceite esencial de todo! Así que las personas que "juegan" en casa con los aceites esenciales para crear un perfume hermoso y complejo ¡son extremadamente limitadas!

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